martes, 9 de agosto de 2011

Capitán América de Joe Johnston

El cómic de "El capitán América" apareció en 1941 de la mano de Joe Simon y el gran Jack Kirby, y su propósito estaba claro, era la manera de incentivar y motivar a las tropas y ciudadanos estadounidenses en la segunda guerra mundial contra el poderoso Adolf Hitler. Así que lo fácil es trasladar esta idea a la película de la manera más digna, cosa que han conseguido.
El Capitán América no es un superhéroe al uso, carece de superpoderes, simplemente la inyección de un suero hace que sus aptitudes atléticas sean muy supeiores a la media y además su cuerpo es capaz de regenarse de las heridas que recibe; así que su verdadero poder proviene desde su interior, es su humanidad lo que hace de él un ser único y especial. Es por ello que no nos encontramos ante la típica película donde los efectos especiales priman sobre la historia, sino que ellos están al servicio de la película; por lo tanto nos encontramos ante una clásica película de aventuras situada en la segunda guerra mundial.
El Capitán América, que en un primer momento sólo actúa como cebo para atraer dinero para la guerra mediante giras por los diferentes estados, ya que sus superiores no ven en él el potencial necesario para la guerra; viaja a Italia para animar a las tropas, y tras ser vituperado por sus propios compañeros y enterarse de la posible captura de su amigo Barnes en el frente, decide con la ayuda de Peggy Carter y Howard Stark - efectivamente, el padre de Tony Stark, también conocido como Ironman - atacar la base de Hydra, donde se encuentra su némesis, Cráneo Rojo, al que intentará eliminar para así salvar a su país y al mundo.
P.D.: Ironman, Hulk, Thor, Capitán América; los Vengadores cada vez están más cerca.

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