Echoes of silence de The Weeknd

En 2011 hubieron dos discos de debut que coparon la mayoría de las listas. Uno fue el homónimo de James Blake, aunque este no fue ninguna sorpresa ya que le precedían unos Eps publicados anteriormente. El otro fue "House of balloons" de The Weeknd, que nos pilló a todos con el pie cambiado. Si el primero aleó de forma excelente el soul con la electrónica, el segundo demolió las reglas básicas del r'n'b.
Además de "House of ballons", ese mismo año editó "Thursday" unos meses más tarde, de un nivel un poco inferior, y a comienzos de este año nos regala, ya que sus mixtapes son gratis accediendo a su página web, este "Echoes of silence", con el que da por finiquitada su trilogía.
En cada uno de ellos Abel Tesfaye, el chico de 22 años que se encuentra tras los mandos del proyecto, ha ido tomando un rol. Si empezó disfrutando de la fiesta, después continuó con la lujuria y excesos de la noche, ya sólo le quedaba darle la espalda a la fiesta y al amor/sexo nocturno.
Desde el primer tema de la mixtape, "D.D.", todo es contundente y concluyente, y además nos define la idea principal por la que discurrirá el disco. Éste es una excelente versión del temazo "dirty Diana" del finito Jacko, donde dejó claro que se sintió despechado y rechazado por Diana Ross, usado como mercancia barata. Lo mismo le ocurre a nuestro protagonista en "next", donde simplemente es una muesca más en la culata de una bailarina; o en "Montreal", donde hubiera hecho cualquier cosa por seguir juntos: "you could have had it all, you could have been taht lonely star". Pero claro, tras la caída, sólo le queda a uno levantarse, "I ain't scared of the fall, I've felt the ground before" en "the fall", la mejor canción del disco, donde el dinero se convierte en el conseguidor de todo lo apetecible.
Y es en la final "echoes of silence" donde Tesfaye se desnuda emocionalmente, simplemente con un piano y su magnífica voz aterciopelada. Tras la ruptura sólo queda el vacío: "don't you leave me all behind, don't you leave my little life".
Pero esta desnudez en el sonido sólo se encuentra al final, desde el principio nos bombardea con unas bases duras y contundentes, a las que les unen unos coros gloriosos. Además les dará un toque oriental, como en "outside"; aunque será en "XO/ the lost" donde juege con nosotros. Esta doble canción empieza de manera sideral y entrecortada, pero en su segunda parte mudará hacia los temas de Burial, donde los ecos lejanos de voces con el pitch subido harán que la oscuridad se haga presente. Pero es que la siguiente, "initiation", contendrá partes de "the lost", formando un tríptico donde una voz que habita todo el espectro sonoro, desde el agudo al grave, nos envolverá en un tenebroso y enfermizo lugar.
Con este altísimo nivel, The Weeknd puede seguir sacando discos cada tres meses y todos estaríamos encantados.